A partir de los doce meses de vida, los niños acuden a su primera revisión en el dentista, y estos chequeos se normalizan desde los seis años. Conscientes de la importancia de la salud bucodental para este público, la mayoría de las pólizas de seguro dental para adeslas que incluye tratamientos y servicios de odontopediatría.
Esta rama odontológica se encarga del cuidado de los dientes de niños, bebés y recién nacidos, previniendo alteraciones en la estructura, tamaño y crecimiento de la dentición. Sus especialistas se ocupan asimismo de tratar los traumatismos dentales o la caries infantil.
En seguros de familia, una de las coberturas odontopediátricas más demandadas es la pulpectomía infantil. Este procedimiento, común en dientes de leche, elimina el nervio dental que ha sido dañado por caries o traumatismos y permite conservar el diente antes de su caída natural.
La corrección de maloclusiones y otras alteraciones de la mordida es otro tratamiento usual en el campo de la odontopediatría. En concreto, abordan cualquier desalineación en la posición de los dientes, a menudo producidas por la succión digital y otros malos hábitos.
La caries dental afecta indistintamente a adultos y niños. En particular, una tercera parte de los menores de seis años sufre esta enfermedad, como reveló una encuesta del Consejo General de Dentistas de España. Existe incluso una patología específica —la caries del biberón— que afecta a la dentición temprana y requiere la intervención del odontopediatra.
Además, las pólizas de salud dental cubren las intervenciones relacionadas con traumatismos dentales durante la primera infancia. Un amplio porcentaje de los niños y adolescentes están expuestos a este tipo de lesiones. Su atención inmediata es fundamental, ya que pueden derivar en una necrosis del nervio dental (anquilosis de dientes temporales). Por su parte, las anomalías congénitas están igualmente cubiertas en la mayor parte de los seguros dentales.